Basta contemplar a Jesús.
04/05/2011
Evangelio
Del santo Evangelio según san Juan 14, 6-14
En aquel tiempo, Jesús dijo a Tomás: «Yo soy el camino, la verdad y la vida. Nadie
va al Padre si no es por mí. Si ustedes me conocen a mí, conocen también a mi
Padre. Ya desde ahora lo conocen y lo han visto».
Le dijo Felipe: «Señor, muéstranos al Padre y eso nos basta». Jesús le replicó:
«Felipe, tanto tiempo hace que estoy con ustedes, ¿y todavía no me conoces?
Quien me ha visto a mí ha visto al Padre. ¿Entonces por qué dices: “muéstranos al
Padre”? ¿O no crees que Yo estoy en el Padre y que el Padre está en mí? Las
palabras que Yo les digo, no las digo por mi propia cuenta. Es el Padre, que
permanece en mí, quien hace las obras. Créanme: Yo estoy en el Padre y el Padre
está en mí. Si no me dan fe a mí, créanlo por las obras.
«Yo les aseguro: el que crea en mí, hará las obras que hago Yo y las hará aún
mayores, porque Yo me voy al Padre; y cualquier cosa que pidan en mi nombre, Yo
la haré para que el Padre sea glorificado en el Hijo. Yo haré cualquier cosa que me
pidan en mi nombre». Palabra del Señor.
Oración introductoria
Padre mío, te pido en nombre de tu Hijo Jesucristo que pueda tener un encuentro
contigo en este momento de oración. Tú eres el único que puede mostrarme el
camino verdadero para mi felicidad y santidad.
Petición
Dios mío, dame docilidad, dependencia y fe para cumplir tu voluntad santísima.
Meditación
«En la respuesta a Felipe Jesús hace referencia a su propia persona como tal,
dando a entender que no sólo se le puede comprender a través de lo que dice, sino
sobre todo a través de lo que Él es. Para explicarlo desde la perspectiva de la
paradoja de la Encarnación, podemos decir que Dios asumió un rostro humano, el
de Jesús, y por consiguiente de ahora en adelante, si queremos conocer realmente
el rostro de Dios, nos basta contemplar el rostro de Jesús. En su rostro vemos
realmente quién es Dios y cómo es Dios.
El evangelista no nos dice si Felipe comprendió plenamente la frase de Jesús. Lo
cierto es que le entreg totalmente su vida. (…) Queremos concluir nuestra
reflexión recordando el objetivo hacia el que debe orientarse nuestra vida:
encontrar a Jesús, como lo encontró Felipe, tratando de ver en Él a Dios mismo, al
Padre celestial. (…) Felipe nos ensea a dejarnos conquistar por Jesús, a estar con
Él y a invitar también a otros a compartir esta compañía indispensable; y, viendo,
encontrando a Dios, a encontrar la verdadera vida» (Benedicto XVI, 6 de
septiembre de 2006).
Reflexión apostólica
Cada cristiano, por haber sido incorporado a Cristo por el bautismo, comparte la
misión de la Iglesia y tiene un papel propio dentro de ella. «Por eso, el miembro del
Regnum Christi pone todos los medios a su alcance, su persona, su tiempo, todas
sus posibilidades para cooperar en la misión evangelizadora de la Iglesia aportando
las riquezas de su carisma específico. Busca conocer y amar a la Iglesia, y
defenderla noblemente» (Manual del miembro del Movimiento Regnum Christi , n.
154).
Propósito
Dedicar hoy un tiempo a rezar en familia para crecer todos en la amistad con
Cristo.
Diálogo con Cristo
Señor, no te dejas ganar en generosidad. Creo en Ti, en lo que has prometido y en
las maravillas que podría hacer en tu nombre. Quiero saber corresponder a tan
grande amor, como lo hicieron Felipe y Santiago. Ayúdame a serte siempre fiel.
«El Espíritu Santo inspira según su infinita sabiduría y su amor eterno; al hombre le
toca corresponder, con generosidad y transparencia, con creciente amor, hasta
fundir su ser entero con ese designio sobrenatural. Es éste el sencillísimo camino de
la fidelidad al plan de Dios»
( Cristo al centro , n. 2337).