Al día con
Dios…
Miércoles 29 de Junio de
2011
San Pedro y San Pablo
La solemnidad de los santos apóstoles Pedro y
Pablo, fundadores de la Iglesia de Roma es la
fiesta de «la unidad y la catolicidad de la Iglesia».
Después de tanto tiempo…
Esa roca se ha mantenido. Esa roca es Pedro.
Cristo construyó su Iglesia, edificio espiritual que ha
resistido al embate de los siglos.
El Espíritu Santo ha iluminado a hombres y mujeres, para
que se convirtieran en "piedras vivas" (1 P 2, 5)
Una sola fe; una sola "roca"; una sola piedra
angular: Cristo, Redentor del hombre.
"¡Bienaventurado tú, Simón, hijo de Jonás!"
Al igual que María la Virgen.
Al igual que San Pablo derribado y abrazado.
Los dos dan pasos grandes
Para ir en busca de los más lejanos.
Para vivir en constante vida misionera.
Id, pues, y haced discípulos a todas las gentes.(Mt 28, 19)
Dando testimonio de Cristo
Por su camino de fe y amor.
Supieron vencer las pruebas
Por la gracia de Dios, en toda circunstancia,
el hombre puede convertirse en signo
del poder victorioso de Dios.
El Cristo por el que Pedro y Pablo dieron sus
vidas sigue animando y fortaleciendo todos
los creyentes de hoy.
Padre Marcelo.
@padrerivas
apóstoles
Hechos 12,1-11 Era verdad: el Señor me ha librado de las
manos de Herodes
Salmo responsorial: 33 El Señor me libró de todas mis
ansias.
2Timoteo 4,6-8.17-18 Ahora me aguarda la corona
merecida
Mateo 16,13-19 Tú eres Pedro, y te daré las llaves
del Reino de los cielos
En aquel tiempo, al llegar a la región de Cesarea de Filipo
Jesús preguntó a sus discípulos: "¿Quién dice la gente
que es el Hijo del hombre?" Ellos contestaron: "Unos que
Juan Bautista, otros que Elías, otros que Jeremías o uno
de los profetas." Él les preguntó: "Y vosotros, ¿quién
decís que soy yo?" Simón Pedro tomó la palabra y dijo:
"Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios vivo." Jesús le
respondió: "¡Dichoso tú, Simón, hijo de Jonás!, porque
eso no te lo ha revelado nadie de carne y hueso, sino mi
Padre que está en el cielo. Ahora te digo yo: Tú eres
Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y el poder
del infierno no la derrotará.. Te daré las llaves del reino de
los cielos; lo que ates en la tierra quedará atado en el
cielo, y lo que desates en la tierra quedará desatado en el
cielo."