Comentario al evangelio del Martes 25 de Diciembre del 2012
“En distintas ocasiones y de muchas maneras habló Dios antiguamente a nuestros padres”, dice la
segunda lectura de hoy. Y nosotros, en plena Navidad, también podemos decir lo mismo: “¡Dios me ha
hablado desde siempre y me habla de tantas y tantas formas!, ¡Dios viene a mí! ¡Quiere hablarme!...”
Realmente, ¿nos damos cuenta de lo que estamos diciendo? Y añade la carta a los Hebreos: “Ahora
nos ha hablado por el Hijo”. ¡Que mejor día que hoy, Navidad, para afirmar y repetirnos una y otra
vez: “Dios me ha hablado por su Hijo… Dios me ha hablado por su Hijo…” ¿Te lo crees? Entonces, la
siguiente pregunta es: “¿Y qué te ha dicho?”
El Dios cristiano, nuestro Dios hecho carne, es Palabra desde siempre, desde el principio, como
proclama hoy el evangelio. Lo propio de Dios es comunicar porque es Palabra. Lo propio de Dios es
amar porque es Amor. Lo propio de Dios es ordenar, clarificar, dar sentido, poner luz… porque es el
“Logos” de Dios.
Cuando Dios habla, ordena, crea, da vida, abre sentidos nuevos. Cuando Dios habla, NOS habla, SE
dice a sí mismo. Y de nuevo la pregunta: “oye, ¿y qué te ha dicho?”
Sería una pena celebrar que la Palabra se hace carne e ilumina nuestro mundo, que tenemos ganas de
ser mejores personas, que adoramos al Niño, que estamos más pendientes de los demás… pero somos
incapaces de escuchar lo suficiente como para poder entender qué te dice a ti, hoy y aquí,
Dios-en-persona.
¡¡¡sshhhh!!! Silencio… Dios está hablando contigo…
Feliz Navidad
Rosa Ruiz, Misionera Claretiana
Rosa Ruiz, Misionera Claretiana