EVANGELIO DEL DIA
¿ Señor, a quién iremos?. Tú tienes palabras de vida eterna. Jn 6, 68
Fiesta de la cátedra del apóstol san Pedro,
Epístola I de San Pedro 5,1-4.
Exhorto a los presbíteros que están entre ustedes, siendo yo presbítero como ellos
y testigo de los sufrimientos de Cristo y copartícipe de la gloria que va a ser
revelada.
Apacienten el Rebaño de Dios, que les ha sido confiado; velen por él, no forzada,
sino espontáneamente, como lo quiere Dios; no por un interés mezquino, sino con
abnegación;
no pretendiendo dominar a los que les han sido encomendados, sino siendo de
corazón ejemplo para el Rebaño.
Y cuando llegue el Jefe de los pastores, recibirán la corona imperecedera de gloria.
Salmo 23(22),1-3a.3b-4.5.6.
El señor es mi pastor,
nada me puede faltar.
El me hace descansar en verdes praderas,
me conduce a las aguas tranquilas
y repara mis fuerzas;
me guía por el recto sendero,
por amor de su Nombre.
Aunque cruce por oscuras quebradas,
no temeré ningún mal,
porque tú estás conmigo:
tu vara y tu bastón me infunden confianza.
Tú preparas ante mí una mesa,
frente a mis enemigos;
unges con óleo mi cabeza
y mi copa rebosa.
Tu bondad y tu gracia me acompañan
a lo largo de mi vida;
y habitaré en la Casa del Señor,
por muy largo tiempo.
Evangelio según San Mateo 16,13-19.
Al llegar a la región de Cesarea de Filipo, Jesús preguntó a sus discípulos: "¿Qué
dice la gente sobre el Hijo del hombre? ¿Quién dicen que es?".
Ellos le respondieron: "Unos dicen que es Juan el Bautista; otros, Elías; y otros,
Jeremías o alguno de los profetas".
"Y ustedes, les preguntó, ¿quién dicen que soy?".
Tomando la palabra, Simón Pedro respondió: "Tú eres el Mesías, el Hijo de Dios
vivo".
Y Jesús le dijo: "Feliz de ti, Simón, hijo de Jonás, porque esto no te lo ha revelado
ni la carne ni la sangre, sino mi Padre que está en el cielo.
Y yo te digo: Tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia, y el poder de
la Muerte no prevalecerá contra ella.
Yo te daré las llaves del Reino de los Cielos. Todo lo que ates en la tierra, quedará
atado en el cielo, y todo lo que desates en la tierra, quedará desatado en el cielo".
Comentario del Evangelio por:
Papa Benedicto XVI
Audiencia general del 07/06/2006 (trad. © copyright Libreria Editrice
Vaticana rev.)
“Yo te digo: tu eres Pedro y sobre esta piedra edificaré mi Iglesia”
"Y yo a mi vez te digo que tú eres Pedro, y sobre esta piedra edificaré mi
Iglesia... A ti te daré las llaves del reino de los cielos; y lo que ates en la tierra
quedará atado en los cielos, y lo que desates en la tierra quedará desatado en los
cielos" (Mt 16, 18-19).
Las tres metáforas que utiliza Jesús son en sí muy claras: Pedro será el cimiento
de roca sobre el que se apoyará el edificio de la Iglesia; tendrá las llaves del reino
de los cielos para abrir y cerrar a quien le parezca oportuno; por último, podrá atar
o desatar, es decir, podrá decidir o prohibir lo que considere necesario para la vida
de la Iglesia, que es y sigue siendo de Cristo. Siempre es la Iglesia de Cristo y no
de Pedro. Así queda descrito con imágenes muy plásticas lo que la reflexión
sucesiva calificará con el término: "primado de jurisdicción"
Esta posición de preeminencia que Jesús quiso conferir a Pedro se constata
también después de la resurrección: Jesús encarga a las mujeres que lleven el
anuncio a Pedro (Mc 16,7)..., después, entre los Apóstoles, Pedro es el primer
testigo de la aparición del Resucitado (Lc 24,34; 1Co 15,5)... Además, el hecho de
que varios de los textos clave referidos a Pedro puedan enmarcarse en el contexto
de la última Cena, en la que Cristo le confiere el ministerio de confirmar a los
hermanos (cf. Lc 22, 31 s), muestra cómo el ministerio confiado a Pedro es uno de
los elementos constitutivos de la Iglesia que nace del memorial pascual celebrado
en la Eucaristía.
En este contexto... indica también el sentido último de este primado: Pedro, para
todos los tiempos, debe ser el custodio de la comunión con Cristo; debe guiar a la
comunión con Cristo; debe cuidar de que la red no se rompa, a fin de que así
perdure la comunión universal. La responsabilidad de Pedro consiste en garantizar
así la comunión con Cristo con la caridad de Cristo, guiando a la realización de esta
caridad en la vida diaria.
servicio brindado por el Evangelio del Día, www.evangeliodeldia.org”