XV Domingo del Tiempo Ordinario, Ciclo C
Los Derechos Humanos de los pobres (1)
“La injusticia de la pobreza y de la marginaci￳n no ha sido resuelta aún .
Abundan los discursos propulsores de proyectos sin ejecutar, a veces
ideológicamente tramposos. Necesitamos al buen samaritano, que no
especula sobre posibles soluciones sino que las aplica en silencio. Hay que
curar heridas y devolver al asaltado lo que le han robado los salteadores”
Esta frase de nuestro Papa Francisco es una frase de antología profética. Es un eco
fiel de Palabra de Dios que recoge S.Mateo escuchando a Jesús “ …tuve hambre y
ustedes me dieron de comer; tuve sed y ustedes me dieron de beber; estaba de
paso y me alojaron, desnudo y me vistieron, enfermo y me visitaron, preso y me
vinieron a ver…” Y ante el asombro de ese encuentro personal con Jesús en el
necesitado de algo o por algo, tan lejos de templos, ceremonias sagradas y actos
piadosos, Jesús les responde con juramento: “Les aseguro que cada vez que lo
hicieron con el más peque￱o de mis hermanos lo hicieron conmigo”
(Mt.25,34-40)
“Necesitamos al buen samaritano” clama hoy nuestro Papa Francisco ante la
injusticia de la pobreza mundial… a buen entendedor pocas palabras… Es un
llamado a todas las comunidades parroquiales del mundo a cuidar de los pobres
como se cuida la Catequesis y las Ceremonias religiosas hasta la más importante
como lo es la Misa… Porque hay muchas comunidades cristianas que piensan
cumplir con su Fe con responsabilidad, cumpliendo con ceremonias religiosas y
comportamiento ajustado a costumbres morales y normales eclesiásticas y cierta
ayuda que depositan en el canasto de Cáritas… o en manos de quiénes piden
limosna…
Todos desde los obispos-sacerdotes-consagradas/os, laicas/os hemos de examinar
a diario nuestra actitud interior frente al pobre … Es más fácil combatir la pobreza
que atender al pobre . Los Gobiernos y Sindicatos y Empresarios temen a los
pobres porque la pobreza es una amenaza y entorpece al orden institucional. Por
eso, tienen una mirada política o de simple ayuda o comercial. En cambio el
cristiano una mirada de Fe.
Mira al necesitado como viendo al mismo Jesús y el trato es sagrado en
actitud de veneración en la medida de su Fe y amor al mismísimo Jesucristo. Se
reviste de los mismos sentimientos de Jesús, quien los dibujó en la parábola del
Buen Samaritano 1
El cristiano ante el prójimo necesitado se detiene , deja toda otra ocupación y corre
al socorro del hermano en situación de necesidad. Es Dios quien lo llama. Es Dios
quien sufre. Es a Dios a quien se socorre y se comparte como de igual a igual. Es
Dios a quien se adora dando de lo suyo con generosidad sin medida lo que el otro
necesite. Por eso, Juan Pablo II cruzó la frontera de la propiedad privada cuando
expresó que la propiedad privada, en el cristiano, está embargada por la necesidad
del prójimo , y, desbordó la máxima moral de dar lo superfluo, al sentenciar que ha
llegado el momento de dar de lo necesario en un fraterno compartir (partir-con) y
sorprendió los sentimientos religiosos asegurando, que, si es necesario, se vendan
los vasos y ornamentos sagrados para cubrir la necesidad de quien la sufra. Pero el
mal de la pobreza,
supera la ayuda, Es estructural . Cala hondo en un real progreso globalizado.
Hoy la pobreza es tema político-social-económico-financiero en simposios de altas
cumbres. Desde los orígenes cristianos siempre ha sido tema central de la Fe en
Jesucristo y su Evangelio . La señal distintiva de una nueva raza de hombres y
mujeres que habían aparecido en la Roma Imperial -según el historiador Suetonio,
coincidiendo con el Evangelista S.Lucas: es que “ no había pobres entre ello” porque
“distribuían el dinero entre ellos, según la necesidad de cada uno” en alegre,
fraterna y orante comunidad humana (Hechos 2, 42-47) En la Historia Humana se
había asomado una nueva política para erradicar la “injusticia de la pobreza” Fue un
primer ensayo de la Política del Reino. Es el desafío que se le presenta a la Iglesia
actual: ¿cómo sembrar la política del Reino de Jesús en nuestro mundo con
progresos técnicos insospechados ?
1 Lucas 10, 29-37
Miguel Esteban Hesayn