HOMILIA DEL IX DOMINGO ORDINARIO.- CICLO A 2014
No todo el que dice Señor, Señor, entrará en el Reino de los Cielos, sino el que hace
la voluntad de mi Padre.
I.-
INTRODUCCIÓN
San Mateo puso en estas palabras de Jesús
después del Sermón de la Montaña como un
resumen final del mismo que ilumina
toda la doctrina de Cristo
.
NO BASTA DECIR, ¡SEÑOR, SEÑOR! PARA ENTRAR EN EL REINO DE LOS CIELOS
,
esta actitud había sido ordinaria en Israel:
a) Jeremías había censurado al pueblo que decía ¡OH el templo de Yahvé OH el
Templo de Yahvé! queriendo confiar mágicamente en él, pero sin poner la
conversión de su vida en la práctica de sus mandatos. (Jer 7,4).
b) Los rabinos de Israel disentían sobre qué era mejor si el estudio de la Ley o su
práctica (era un tema candente en los medios rabínicos).
Jesús exige la práctica
.
No cabe como excusa el haber profetizado en su nombre o el haber expulsado demonios
o el haber hecho milagros.
Si no se práctica la Ley, todo eso no vale.
Solo entrará en el Reino de los Cielos el que cumple la voluntad de mi Padre
.
Es decir el que se haya dejado transformar por el amor en el cumplimiento de su voluntad.
2.- ¿
EN QUE CONSISTE LA VOLUNTAD DEL PADRE
?
La voluntad del Padre está expresada en el Sermón de la Montaña y que hemos
considerado en domingos anteriores.
Podrás decir “
Yo no puedo amar a mi enemigo
”, pero sí puedes proponerte no odiarlo.
Eso ya es un comienzo del amor…. Pero si tampoco eso te resulta todavía posible puedes
procurar que la aversión no llegue a expresarse en palabras. Eso ya sería un paso hacia
el amor.
No se trata aquí de todo o nada
Los partidarios del todo o nada rara vez parecen vivir de acuerdo con su rigidez. Más bien
sucede que como todo no lo quieren ni pueden cumplir inmediatamente no intentan hacer
nada para ir avanzando.
No, lo que el Sermón de la Montaña exige no es todo o nada sino que hay un comienzo y
un proceso, un caer y un levantarse.
Entonces, ¿qué es lo que importa realmente?.
Está bien claro: que no hay que entender el mensaje como un mandamiento rígido, sino
como una exigencia viva del amor.
No se trata de una fuerte imposición,
se trata de la voluntad del Padre entrañablemente
bueno
, se trata
siempre de la atracción del amor
, de la invitación a la fiesta eterna del
amor. ”
El que sea justo que se justifique más, el que sea santo que se santifique más
”
Tendríamos corazón de piedra si no nos afectara profundamente esta atracción del amor
Salvador.
Desde de lo hondo de nuestro corazón debemos exclamar con palabras de la Escritura:
“Me sedujiste Señor y he quedado seducido por tu amor”
Debemos liberarnos del engaño de que Dios es un déspota, opresor del hombre con
mandatos caprichosos, creyendo:
a)
Que Dios es Amor
. Es un Padre amoroso
Que el hombre ha sido creado por amor y para el amor
b)
Los mandatos no son caprichosos sino para que podamos realizar la vida en el
amor a Dios y al prójimo, yendo asemejándonos a Él en el amor
.
Solo puede entrar en el Reino de Dios el que se haya dejado transformar por su
amor en el cumplimiento de sus mandatos entendidos en sentido positivo tal como
han sido interpretados por Cristo en el Sermón de la Montaña.
3.-
LA LLAMADA VOLUNTAD PERMISIVA
a) Se ha dicho que en Dios hay una voluntad permisiva por la cual permite el mal
Pero en Dios no hay dos voluntades: una voluntad de beneplácito y una voluntad
permisiva, porque en Dios todo es idéntico por razón de su simplicidad.
Tampoco en Dios hay dos intenciones distintas: la intención de beneplácito y la
intención permisiva.
No hay más que una voluntad en Dios que es la voluntad de beneplácito que
incluye la voluntad permisiva. Ésta se fundamenta en la voluntad de beneplácito,
Dios tiene, en cierto modo el beneplácito de la permisión, no es una mera
condescendencia sino que es el beneplácito de la permisión.
El fundamento de esta unidad consiste en que Dios ha querido crear un ente libre y
soberano. Esta libertad es el supremo bien porque es una participación de la
soberanía de la divinidad y da capacidad para recibir la gracia y poder así participar
de la vida trinitaria de amor.
Dios ha estimado que es mejor crear un ser libre aún a trueque de que haya mal,
que evitar que haya males negando la existencia de esos entes libres.
Al crear un ser libre corpóreo espiritual y un mundo en que esté el hombre en
evolución hacia él, necesariamente tiene que haber males, sufrimientos y pecados.
b) ¿Cómo comportarnos ante los males y sufrimientos que Dios permite?
1).- En las cosas del servicio de Dios, cuando el permite el fracaso después de
haber hecho por nuestra parte todo lo que podíamos, debemos recordar las
palabras de Cristo:
Unos siembran otros recogen
.
2).- En nuestro adelantamiento espiritual cuando a pesar de nuestros esfuerzos,
parece que no adelantamos nada.
Debemos decir:
Señor ayúdame que sin ti no puedo nada pero con tu gracia
lo puedo todo
.
3).- Ante los apuros económicos.
Debemos decir:
Dios proveerá
4).- Ante la enfermedad propia o de familiares.
Debemos decir:
Sea lo que Dios quiera
, si es posible pase de mí este
sufrimiento pero hágase tu voluntad.
5).- Ante una catástrofe económica particular.
Debemos decir:
Dame fortaleza y ayúdame a superarlo
.
4.-
TERMINA JESÚS DICIENDO
:
“EL QUE ESCUCHA ESTAS PALABRAS MÍAS Y LAS PONE EN PRACTICA SE
PARECE A AQUEL HOMBRE PRUDENTE QUE EDIFICÓ SU CASA SOBRE
ROCA”
Jesús nos enseñó una religión del corazón
, Jesús
se alzó contra el formalismo
supersticioso y mágico de los fariseos
y
explicó que
la religión
no
consiste
solo en
prácticas exteriores sino
en la transformación del corazón del hombre por el amor
:
en la práctica del amor a Dios y al prójimo, haciendo la voluntad de su Padre.
El corazón simboliza
lo que Sta. Teresa llamaba el hondón del alma, a
lo más íntimo, lo
más profundo del hombre, el centro de donde brota el don radical y total del ser
.
No se trata de hacer unas obras que te den un derecho a un premio exterior
a ti,
sino en
una transformación de todo tu ser
, transformando tu voluntad en la de Dios, amando con
el mismo amor con que Dios te ama, que es el Espíritu Santo.
Esta religión no puede ser derrumbada por nada exterior porque esta fundada sobre
firme roca; está fundada en lo más intimo de mi intimidad donde solo puede llegar
Dios, donde solo Dios Mora
.
¿
QUÍEN NOS PODRÁ APARTAR DEL AMOR DE DIOS EN CRISTO
?
“Ni la vida, ni la muerte, nada, ni nadie, puede apartarnos de nuestro amor a Dios en
Cristo Jesús”. (S.Pablo)
Padre Manuel Benito Fernández