EVANGELIO DEL DIA
¿ Señor, a quién iremos?. Tú tienes palabras de vida eterna. Jn 6, 68
sábado 21 Diciembre 2013
Feria de Adviento: Semana antes de Navidad (21 dic.)
Cantar de los Cantares 2,8-14.
¡La voz de mi amado! Ahí viene, saltando por las montañas, brincando por las
colinas.
Mi amado es como una gacela, como un ciervo joven. Ahí está: se detiene detrás
de nuestro muro; mira por la ventana, espía por el enrejado.
Habla mi amado, y me dice: "¡Levántate, amada mía, y ven, hermosa mía!
Porque ya pasó el invierno, cesaron y se fueron las lluvias.
Aparecieron las flores sobre la tierra, llegó el tiempo de las canciones, y se oye en
nuestra tierra el arrullo de la tórtola.
La higuera dio sus primeros frutos y las viñas en flor exhalan su perfume.
¡Levántate, amada mía, y ven, hermosa mía!
Paloma mía, que anidas en las grietas de las rocas, en lugares escarpados,
muéstrame tu rostro, déjame oír tu voz; porque tu voz es suave y es hermoso tu
semblante".
Salmo 33(32),2-3.11-12.20-21.
Denle gracias, tocando la guitarra,
y al son del arpa entónenle canciones.
Entonen para él un canto nuevo,
acompañen la ovación con bella música.
Pero el proyecto del Señor subsiste siempre,
sus planes prosiguen a lo largo de los siglos.
Es feliz la nación cuyo Dios es el Señor,
el pueblo que él escoge como herencia.
En el Señor nosotros esperamos,
él es nuestra defensa y nuestro escudo;
en él se alegra nuestro corazón,
en su santo nombre tenemos confianza.
Evangelio según San Lucas 1,39-45.
En aquellos días, María partió y fue sin demora a un pueblo de la montaña de Judá.
Entró en la casa de Zacarías y saludó a Isabel.
Apenas esta oyó el saludo de María, el niño saltó de alegría en su seno, e Isabel,
llena del Espíritu Santo,
exclamó: "¡Tú eres bendita entre todas las mujeres y bendito es el fruto de tu
vientre!
¿Quién soy yo, para que la madre de mi Señor venga a visitarme?
Apenas oí tu saludo, el niño saltó de alegría en mi seno.
Feliz de ti por haber creído que se cumplirá lo que te fue anunciado de parte del
Señor".
Comentario del Evangelio por :
Papa Francisco
Encíclica “Lumen fidei”, § 39 (trad. © Libreria Editrice Vaticana)
“María se puso rápidamente en camino”: la fe se tiende a invitar a los otros
a la alegría
Es imposible creer cada uno por su cuenta. La fe no es únicamente una opción
individual que se hace en la intimidad del creyente, no es una relación exclusiva
entre el «yo» del fiel y el «Tú» divino, entre un sujeto autónomo y Dios. Por su
misma naturaleza, se abre al «nosotros», se da siempre dentro de la comunión de
la Iglesia. Nos lo recuerda la forma dialogada del Credo, usada en la liturgia
bautismal.
El creer se expresa como respuesta a una invitación, a una palabra que ha de ser
escuchada y que no procede de mí, y por eso forma parte de un diálogo… Es posible
responder en primera persona, «creo», sólo porque se forma parte de una gran
comunión, porque también se dice «creemos». Esta apertura al «nosotros» eclesial
refleja la apertura propia del amor de Dios, que no es sólo relación entre el Padre y
el Hijo, entre el «yo» y el «tú», sino que en el Espíritu, es también un «nosotros»,
una comunión de personas. Por eso, quien cree nunca está solo, porque la fe tiende
a difundirse, a compartir su alegría con otros… Tertuliano (c. 155-c. 220)… dijo que
el catecúmeno, «tras el nacimiento nuevo por el bautismo», es recibido en la casa
de la Madre para alzar las manos y rezar, junto a los hermanos, el Padrenuestro,
como signo de su pertenencia a una nueva familia.
servicio brindado por el Evangelio del Día, www.evangeliodeldia.org”