II Domingo de Pascua o de la Divina Misericordia, Ciclo A.
Luis María Martínez Sanjuan, C.M . .
Cómo es tu Pascua? ¿PASCUA, Pascua, pascua, pascua…? ¿Has visto al Señor?
¿Dónde? ¿Con quién? Hoy en tu casa, digo, en tu parroquia puedes jugar al veo-
veo. A ver si así lo ves mejor.
—Vaya. ¡Demasiadas preguntas repetidas! Otra vez te pones pesao.
—Yo también veo que no has leído la segunda lectura del domingo : “No habéis
visto a Jesucristo, y lo amáis; no lo veis, y creéis en él; y os alegráis con un gozo
inefable y transfigurado, alcanzando así la meta de vuestra fe: vuestra propia
salvación”. ¿No dice que no hace falta verlo, y que podemos ser buenos
creyentes y vivir alegres sin haberlo visto?
Decid lo que queráis, que yo veo que hay gente en la Iglesia que no hace caso
a la invitación del Papa a abrir las puertas y a salir . ¿No veis que nos pasa como a
los apóstoles que nos cerramos por miedo a… (tantas cosas)? ¿No piensas que
nuestra Iglesia está siendo poco misionera?
Pero bueno, me callo; con gente tan respondona no se puede. Me contentaré
con estar atento al Espíritu y con la fracción del pan en las casas y se acabó.
Con permiso de somos.vicencianos.org