Solemnidad. Santísima Trinidad, Ciclo A )
Luis María Martínez Sanjuan, C.M..
﾿Qué…? ﾿Piensas que eso de la Trinidad es algo complicado que no
tienes otro remedio que creer, pero que no te agrada mucho? ¿Será eso
que tanto quebradero de cabeza le produjo a san Agustín? Lo de la
concha y el mar, ¿recuerdas?
Claro que, pensándolo bien, resulta que el Evangelio está lleno de
alusiones tanto del Padre, como del Hijo, como del Espíritu, alusiones
cargadas de confianza , porque Dios se fija en lo pequeño, en los
pequeños… Y tiene que ser una cosa del todo importante para quienes
tenemos fe, aunque no lo entendamos del todo. [Estamos tocando el
Misterio del Inmenso…]
Por eso hoy es un buen día para hacer el esfuerzo de acercarnos
al misterio de Dios. Aunque como Dios es “familia”, algo sabemos.
Solo algo, ¿eh? Porque Dios sólo es Amor. Amor total. Sí, Amor que no
logras entender del todo, aunque ames.
Y por quedarme con algo relacionado con este día, te digo que a
mí, cuando pienso en muchas gentes de esas que llamamos
“alejadas”, me encanta lo que dice san Pablo, que el Espíritu grita
desde el fondo del ser humano clamando: ¡Abba! ¡Padre! Entonces,
digo yo, clamará desde el fondo del corazón de los que no van a misa,
o desde los que dicen que no creen en Dios, o desde tantos jóvenes
desorientados, o… [añádelo tú]. Como decía un cura: ᄀQue maravilla!
Qué hermoso, ¡que maravilla!, ¿verdad? Después de todo lo que
nos comunicó Jesús va y viene el Espíritu a ponernos en relación tanto
con Jesús, el que se fue, como con el Padre el “provocador de Vida”
que nos espera con más Vida… No lo entiendo del todo, pero me
encanta. ¿Y a ti?
Con permiso de somos.vicencianos.org