Lectio Divina: II Domingo de Adviento, Ciclo B.
Autor: P. Chuno Chávez Alva , C.M.
Preparen el camino al Señor
LA PALABRA HOY: Isaías 40,1-5.9-11; Salmo 84; 2 Pedro 3,8-14; Marcos 1,1-8
Ambientación: Corona de adviento, 2ª vela encendida; una biblia abierta y un
micrófono o megáfono.
Cantos sugeridos: Ven, ven Señor no tardes; Preparad el camino
Ambientación
El adviento en sí mismo es un tiempo de expectativa, de preparación, de
disposición, de esperanza, de búsqueda, porque está marcado por la espera del
Señor. Es buscar disponer nuestro corazón para que el Señor pueda nacer en cada
uno de nosotros, para que Él tenga un lugar en nuestras vidas.
Oración inicial
Oh Padre,
la palabra de tus profetas nos invita urgente:
“Preparen el camino del Se￱or”…
¿Qué caminos hemos de prepararte,
sino un corazón arrepentido y humilde?
Mientras caminamos por el desierto,
otórganos el don de tu Espíritu Santo:
Para conocernos y conocerte,
para realizar en todo momento tu voluntad,
para no dejar, en fin, nada en nosotros
que no te pertenezca en fidelidad.
Llena nuestros corazones de esperanza
por la paz, la justicia, la fraternidad y la vida
que ahora tenemos y anhelamos.
Te lo pedimos por Aquel que, en bondad,
viene ya pronto, como rey humilde de pesebre,
para hacernos ricos con su pobreza, AMÉN.
I. Lectio: ¿Qué dice el texto? – Marcos 1, 1-8
Motivación: Como Juan, también nosotros podemos hacernos mensajeros en los
desiertos y montañas de la vida para preparar el camino de un Dios que quiere
hacerse presente en la historia. Pero debemos ser mensajeros de la buena noticia,
no de la amenaza ni de la discordia.
1. Proclamar el texto en voz alta (todos de pie).
2. Cada uno puede leer en voz alta el versículo que más le llamó la atención
(sentados).
Preguntas para la lectura:
En Mc 1,1: ¿Qué se dice de Jesús? ¿Qué significan estas afirmaciones sobre
Jesús?
Mc1, 2-4: ¿Cuál es la misión de Juan? ¿En qué consiste su predicación?
Mc1, 7-8: ¿Qué dice Juan sobre Jesús? ¿Qué dice de sí mismo?
Otros textos bíblicos para confrontar: Mateo 3, 1-12; Lucas 3, 1-18; Juan 1,
19-28 .
II. Meditatio: ¿Qué me dice? ¿Qué nos dice el Texto?
Motivación: Juan el Bautista no es sólo un personaje del pasado. Su mensaje de
conversión y su anuncio del Mesías, su modo de vivir y su predicación apuntaban a
Jesús. En este adviento se dirige a cada uno de nosotros.
¿Qué actitudes de Juan podemos hacer nuestras en este Adviento?
¿Hasta qué punto Jesús está ocupando un lugar decisivo también en mi vida?
Juan invitaba a la conversi￳n, al cambio de mentalidad y de actitudes… ¿por
dónde comenzar?
¿Cómo puedo participar de la misión de Juan Bautista?
¿Hay algo que debo solucionar antes de celebrar la Navidad?, ¿qué puedo hacer
para que mi vida cada vez más corresponda con lo que el Señor quiere y espera
de mí?
Luego de un tiempo de meditación personal, compartimos con sencillez nuestra
reflexión, lo que el texto ME dice a mi propia realidad y situación personal.
III. Oratio: ¿Qué le digo al Señor motivado por su Palabra?
Motivación: La Palabra meditada nos lleva a comprender nuestra historia, nuestro
paso por el mundo, desde los planes de Dios. Y aun sabiéndonos indignos, como
Juan, nos brota del corazón una oración agradecida porque se ha fijado en nosotros
para continuar anunciando a todas las gentes nuestra esperanza en el Señor que
viene.
Luego de un tiempo de oración personal, podemos compartir en voz alta nuestra
oración, siempre dirigiéndonos a Dios mediante la alabanza, la acción de gracias
o la súplica confiada.
Se puede, también, recitar el salmo responsorial que corresponde a este
doming o (Salmo 84).
IV. Contemplatio: ¿Qué me lleva a hacer el texto?
Motivación: El tiempo de Adviento es un tiempo de cambio, de conversión. San
Vicente estaba convencido que la conversión es ante todo un don de Dios: “Es obra
de la pura misericordia de Dios y su omnipotencia” (VII, 48). Pero es también obra
humana, en la medida que la persona responde a la búsqueda y a la gracia de Dios
y se deja salvar o transformar por Cristo : “No nos empeñemos en seguir nuestros
caminos, sino los caminos por los que Dios quiera señalarnos… ensanchemos
mucho nuestro corazón y nuestra voluntad en su presencia, sin decidirnos a una
cosa o a otra hasta que Él haya hablado” (VII, 438).
“El Adviento es un tiempo para confiarnos de nuevo al amor misericordioso de Dios,
interiorizando los relatos bíblicos de nuestra salvación. Gracias a la vida de
personas como María, José, Juan el Bautista, Zacarías e Isabel, experimentamos el
poder salvífico de Dios, pastor de nuestras almas. Sus relatos de salvación están
ligados a la historia de nuestras vidas.
Un buen Adviento nos ayudará a ver que Dios quiere abrir nuestras mentes y
nuestros corazones para ᆱPreparar el camino del Se￱orᄏ “. (Carta de Adviento 2014
del Superior General)
Compromiso:
Hacernos “eco de la voz del desierto” invitando e invitándonos
constantemente a la conversión de lo que se opone al paso de Dios.
Preparar nuestra revisión de vida para hacer una buena confesión de fin
de año.
Oración final
Señor Jesús, nos invitas a vivir tu Navidad
de manera más plena y más vivencial
por eso, nos dices: ‘preparen el camino,
enderecen sus senderos’.
Tú nos invitas, a que tu nacimiento
sea para nosotros como otro nacimiento
viviendo más plenamente tu Palabra,
asumiendo tu proyecto de amor en nuestra vida,
dando testimonio de ti,
tanto en la familia como en toda nuestra vida,
por eso, te pedimos que estos días de Adviento
sean días donde Tú vayas abriendo nuestro corazón,
y nos transformes con tu gracia,
tu amor, tu misericordia y tu bondad
llenándonos de ti, uniéndonos a ti.
Que así sea.
Con permiso de somos.vicencianos.org