INMCULADA CONCEPCIÓN - TIEMPO ADVIENTO. CICLO A c
LA INMACULADA UNA PROPUESTA ALTERNATIVA.
Lucas escribe a comunidades de Asia Menor, Macedonia y en su mayoría griegos
de comunidades paulinas quienes llevan en lo más profundo de su corazón el
teatro; cuya finalidad es tocar el sentimiento para hacer más sólido el
conocimiento acerca de la persona de Jesús. La música constituye el culmen de
la representación escénica de Lucas. Su relato contiene tres himnos o cánticos.
Aunque Lucas no los llama “himnos”, los cristianos los han cantado durante
siglos. Los dos primeros el Benedictus, cantado por Zacarías, y el Magníficat,
cantado por María y el tercero el Nuca dimittis, cantado por Simeón. Dado que
cada uno de ellos lo canta un individuo, podríamos imaginarlos como tres arias.
Además de estas tres arias, un coro de ángeles canta una breve canción en el
cielo nocturno a los at￳nitos pastores que están en la tierra: “ᄀGloria a Dios en
los más alto del cielo, y en la tierra paz a los hombres que Él ama!” (2,14). La
navidad se narra como una bella obra de teatro sublimada por la música (2,1-
20).
LA FE SANA LOS MIEDOS.
En la anunciación la fe es anuncio de alegría y salvación: alégrate favorecida del
Señor. Él está contigo. La palabra, el anuncio, si se acoge, engendra temores
por no conocer su significado: “se turb￳ y pensaba que significaba ese saludo”.
(es el temor de dejar entrar a Dios en nuestra vida, particularmente en navidad)
El ángel le dijo: No temas María el Señor está contigo. La fe es para quitar
miedos, la religión para quitar problemas. La fe da paz, la religión produce
miedo. “no temas María, gozas del amor de Dios”. El amor, favor de Dios, quita
todo temor.
Cuando María sana el miedo, comienza a realizarse la promesa: “concebirás y
darás a luz un hijo”. La misi￳n de la Iglesia es sanar no crear más miedos para
que Jesús nazca en el coraz￳n del creyente. “Quien nace por la predicaci￳n en el
coraz￳n del hombre reinará hasta el final”.
María necesita un signo. María no es la ingenua de la azucena en mano,
arrodillada sin saber de qué se trata. La fe es por signos y la vida cristiana es
verificar si lo que Dios nos ha prometido se ha cumplido. “﾿c￳mo será eso si no
conozco var￳n?”. El signo es ISABEL.
El ángel, responde a la petición: El Espíritu Santo vendrá sobre ti como ha
venido sobre Isabel, la estéril.
María creyó este signo porque era más fácil para ella tener un hijo siendo virgen
que para Isabel siendo estéril y Zacarías longevo. Así define la fe Lucas: “lo que
es imposible para el hombre es posible para Dios”
La respuesta de María es de un creyente: “Aquí está la esclava del Se￱or, que se
realice en mi la Palabra. (Jesús).
La fe es creer en la Palabra (seguimiento de Jesús-Palabra) para que en
NAVIDAD nazca en nosotros Jesús, esa es la misión de la Iglesia por la
predicación y los sacramentos.
El CUERPO ES TEMPLO
Que un cuerpo humano pueda ser templo del Espíritu Santo es la máxima
posibilidad de la persona humana. La Inmaculada Concepción, entre otras
muchas significaciones incluso dogmáticas nos revela que la maduración humana
no se puede desarrollar al margen del cuerpo como don de Dios.
Mientras que el cuerpo humano no sea redimido de su manipulación incluso
moralista la pregunta para el hombre y la mujer seguirá siendo la misma del
Génesis: “﾿d￳nde estás?” Un cuerpo sin ser salvado de la moda, la pornografía,
el abuso por dinero o la dependencia mediática, tendrá que seguir respondiendo:
“Oí tus pasos en el jardín y sigo teniendo miedo; por eso me escondí de ti…” “﾿Y
quién te ha dicho que estabas desnudo? La desnudez de hoy no tiene solo
connotación artística o sexual, sino que es la condición existencial del hombre y
la mujer, su precariedad y debilidad ante el ataque de la cultura del irrespeto al
cuerpo.
Hoy impera el poder del icono o la imagen, se nos invaden los sentidos de
información y se nos contaminan con tantas luces; el ruido no da espacio a la
palabra; lo mediático está lleno de insinuaciones sensoriales y halagos
sensuales; todo muy bien presentado para ser consumido. Los psicólogos
sociales afirman que toda saturación lleva a la indiferencia o a dependencias
destructivas como ha ocurrido con la manipulación del cuerpo.
LA PALABRA DE LOS LIMPIOS DE CORAZÓN .
Hoy cuando la gran parte de nuestras relaciones personales y sociales se han
llenado de corrupción, mentira, egoísmo, difamación, murmuración, sexo
pornográfico patrocinados por las costosas publicidades, es sano y necesario
mantener propuestas alternativas de humanismo, o que nos permitan desde la
fe presentar como íconos y experiencias a los limpios de corazón, no solo como
personas sino también como parejas y familia, a luchadores(as) de valores
humanos y cristianos, a los de conducta ética; quizás como los únicos capaces
de “derribar a los poderosos que manipulan el cuerpo y exaltar a los humildes”,
como cantó María en el magníficat .
QUIEN NOS CUBRE.
En el Génesis, primera lectura, mirando la propia desnudez, Adán y Eva, deciden
esconderse para evitar la mirada de los espectadores: “Cogiendo hojas de
higuera se hicieron unos ceñidores” para cuidar su intimidad y libertad
arrebatadas por el mal “se revistieron desde sí mismos, la moda, cuando antes
estaban cubiertos por Dios. (Gn 3,9-15-20).
La inmaculada concepción, cuya fiesta se celebra en Adviento nos ayuda a vivir
este tiempo con alegre esperanza, como quien se extraña de las promesas de
Dios y, a la vez, cree sin temores en lo que nos promete la Palabra en la virgen
bajo la advocación de Inmaculada Concepción. La fiesta de hoy es una nueva
propuesta para que Dios, como en María, por medio del Espíritu que es la
Palabra, engendre a su hijo Jesús en nuestra vida; y “el Espíritu nos cubra con
su sombra” “Bendito sea Dios padre nuestro se￱or Jesucristo, que nos ha
bendecido en él con toda clase de bendiciones espirituales y celestiales” (La
Inmaculada concepci￳n). “Cantemos al Se￱or un canto nuevo, pues ha hecho
maravillas, su diestra y su santo brazo le han dado la victoria” (Sal 97).