1 de Enero de 2017, Maternidad de María: Lc 2, 16-21
Hoy tenemos varias celebraciones: comienza el nuevo año, pero sobre todo es una
gran fiesta de la Virgen como Madre de Dios y es la octava de Navidad y la circuncisión
de Jesús e imposición de su nombre. También es la jornada mundial sobre la paz.
1. Comienza el nuevo año. Esto no es una celebración litúrgica, sino algo sólo
convencional en el calendario civil. En otras civilizaciones o culturas comienza el año
en otras fechas. Lo nuestro del 1 de Enero viene de una costumbre romana en que
comenzaban a regir los cónsules. Pero es una ocasión y una oportunidad para pensar
que el tiempo pasa y que debemos hacer realidad lo de: “a￱o nuevo, vida nueva”. El
tiempo no es algo fijo, nosotros pasamos por él y ya no lo podemos recuperar, sólo
podemos aprovechar mejor el que va a venir. Este es un tiempo de bendición, como
comenzamos en la primera lectura de la misa. Pero no sólo queremos que Dios nos
bendiga. Todos debemos ser bendición para los demás y para el mundo. Por eso
aprovechemos el comienzo de un nuevo año para una mayor limpieza de nuestras
culpas y un hermoso deseo de aprovechar esta oportunidad que nos da Dios.
2. Celebramos sobre todo la solemnidad de María Madre de Dios. Es el mayor título
que un ser creado puede tener. Ha habido muchos que dicen ser impropio de María
llevar ese nombre porque a Dios nadie lo ha hecho. En parte tienen razón; pero María
es la madre de Jesús y, como Jesús, además de hombre, es Dios, a su madre la
podemos llamar Madre de Dios. Así lo entendieron los obispos reunidos en Éfeso en el
año 431. Y desde entonces así la proclamamos, señalando la unión tan profunda con
su Hijo “en las penas y alegrías”, y también en la redenci￳n y en las gracias que Dios
nos va dando. Por eso es también nuestra madre espiritual y madre de la Iglesia. En
este día nos alegramos por las maravillas que Dios ha hecho en su madre. Ella, aun
colmada de dones, siguió siendo libre y cooperó generosamente. Si María es nuestra
madre, la contemos nuestros problemas y pidamos su ayuda para superarlos; pero
sobre todo hagamos en este nuevo año lo que gustaría a nuestra madre del cielo.
3. A los ocho días circuncidaron a Jesús. A nosotros nos puede decir muy poco;
pero era muy importante para los israelitas: era el día de la entrada y aceptación legal
en la comunidad de Israel y de hacerse responsable de la carga que supone la ley. Era
como otro nacimiento. Nacer es comenzar y, en cierto sentido, nacemos varias veces.
Hasta en lo material, cuando alguno se ha salvado de un gran accidente, dice que ha
vuelto a nacer. También puede decirse cuando comienza una vida social muy diferente,
como era la circuncisión para los israelitas. Y mucho más nacemos nosotros cuando
comenzamos una vida de gracia, como es el bautismo. Y así como para nacer a la
vida del cuerpo se necesita ayuda externa, así es para la circuncisión y el bautismo.
El nombre de Jesús se lo puso el mismo Dios. Así el ángel se lo dijo a María y a
José. Los israelitas daban mucha importancia al significado, y Jesús significa “Dios
salva”. Debemos poner mucho amor y confianza al pronunciar este bendito nombre.
4. Jornada mundial de la paz. Así se llama este día desde 1967. Todos los años el
papa nos da un mensaje especial sobre la paz. En este año de 2017, en que se
cumplen 50 a￱os de mensajes, el del papa Francisco es: “La no violencia: un estilo de
política para la paz”. Dice el papa que la caridad y la no violencia deben guiar el modo de
tratarnos en las relaciones interpersonales, sociales e internacionales. No se puede responder a
la violencia con otra violencia, sino que la “no violencia” debe ser algo activo, como en realidad
ha sido en personas conocidas . Pero no basta. Para que sea una mentalidad, algo efectivo
a nivel mundial, debe penetrar como un estilo de actuar en la política de los estados y
pueblos. Por eso hace un llamamiento a favor del desarme, como también de la prohibición y
abolición de las armas nucleares. La no violencia debe penetrar en primer lugar en la vida de
las familias. Que María, madre de Dios y madre nuestra nos ayude a conseguir la paz.