Solemnidad de la Inmaculada Concepción

INGENUA FIDELIDAD LA DE SANTA MARÍA-LA INMACULADA

Padre Pedrojosé Ynaraja

1.- Según se cuenta en Nazaret, la jovencita María, hija de Joaquín y Ana, había ido como todas las tardes a buscar agua a la fuente. Estando allí se le acercó un joven y ella, por la estricta fidelidad que le unía a su esposo, creyó que no debía entretenerse a hablar con él y marchó de inmediato a su domicilio, más bien al domicilio de sus padres, ya que el suyo estaba en vías de construcción. En la casa estaba sola, asombrada volvió a ver al mismo joven y se turbó. ¿Qué hacía allí? ¿Cómo había entrado?

Pero la cara del intruso no le dio miedo, se le notaba a la legua que era un santo, tal vez un ángel. No sabía qué hacer. Que fuera lo que Dios quiera, pensó. Lo que viene a continuación ocurrió en un lugar que la arqueología nos asegura que es el mismo que visitamos en la actualidad.

2.- Una estrella dice que fue allí donde el Verbo de Dios, su Palabra, se hizo hombre. La arqueología afirma que no pudo ser exactamente en aquel punto. Una jovencita ya prometida no podía de ningún modo dejar entrar a lo más interno e íntimo de la mansión, a un varón. Fue un poco más adelante. Cuando allí estamos como fieles, ocupamos su lugar y como marco del encuentro, vemos la gruta, sus mismas paredes, su mismo espacio. Recapacitamos y creemos que somos indignos de permanecer en el mismo lugar del misterio. Es mejor separarse un poco y meditar y rezar contemplando en nuestro interior la escena.

3.- Habló con fonemas o con voz interior, infusa, revelada, que no permitía ninguna duda. No lo sabemos. La saludó: Shalom lach Miriam. Paz, María. La saludaba dirigiéndose a ella con su nombre. ¿es que tal vez la conocía? ¿sin duda aquella voz que sonaba en sus oídos y resonaba en su interior, venía de Dios. Perpleja, se dispuso a escuchar lo más serena que pudiese.Lo que empezó en Siquem cuando el Señor se le revelaba hablando a Abraham. Lo que se anunció por medio de los profetas, se hacía presente ahora y allí.

4.- Llena de Gracia, le decía. Pero si Ella era una criaturita, lo más pequeño que Dios había creado. ¡Que asombrosa afirmación! Debía permanecer espiritualmente entregada a lo que oía por boca del mensajero. ¿Quién era ella para oponerse? ¿Podía preguntar? Pensaba en su interior. Sí, nada hay imposible para Dios, continuaba el mensajero. Quisieras compartir esto que confidencialmente se te dice y vas a conseguirlo si Tú quieres. Isabel que sabes muy bien que en su vejez se aflige de no haber engendrado ningún hijo, ahora ya está esperando uno, a ella puedes confiarte. Dios que te ha escogido y conoce tu bondad, también sabe tus limitaciones, tu necesidad de compañía en el misterio, por eso te digo que a ella puedes acudir.

5.- Nada objetaré, pese a que me sienta tan indigna. ¡que sea lo que Dios quiera! Nada más supo decir, y era muy suficiente. Se le notaba en su mirada que, pese a su simpática ingenuidad, no era una chica tonta. Era dócil y amable. Suficientísimo. El ángel en aquel momento fue el que se admiró. Lo más justo es que se alejase inmediatamente a comunicar el gran prodigio a los habitantes celestiales. Aquella chiquilla había tenido la valentía de confiar totalmente en Dios. La nueva Eva, sin duda. La que no sucumbiría a la tentación, la que desde un principio y para siempre estaba repleta de la Gracia del Señor. A la que todos debían contemplar y olvidar, si es que en el Cielo existe la memoria, todo lo ocurrido en el Paraíso.

6.- Una nueva humanidad comenzaba a existir en aquella chispita femenina que facilitaba que el Eterno lo purificase todo y la tierra se hiciera planeta sagrado. Pensadlo como queráis, mis queridos jóvenes lectores. Imaginad la estampa como podáis, pero no os quedéis indiferentes. No continúo. Antes de escribiros había rezado el rosario, que hoy lunes, precisamente, su primer misterio era lo que os he contado. Paso a mi iglesita a celebrar yo también solo, la Santa Misa. Pediré al Señor por vosotros. Pedid cuando sea, vosotros también por mí.