Salmos diarios, Ciclo I, Año Impar. Explicados
V Semana del Tiempo Ordinario
Viernes
Salmo 31
Perdona, Señor, nuestros pecados . ¿Qué hay más bello en la vida que experimentar el
perdón de Dios? Sin embargo, por la crisis que el sacramento de la Reconciliación vive desde
hace tiempo, todavía hoy muchos creyentes siguen sin acercarse al confesionario. Perdona,
Señor, nuestros pecados.
La crisis de debe a “la debilitación del sentido de pecado”. Pío XII, afirmaba: “Quizá el
pecado mayor en el mundo actual es precisamente haber perdido el sentido de pecado”. Pero,
¿por qué se da una crisis del sentido del pecado? La crisis se encuentra en la falta “del
sentido de la ofensa a Dios. En un mundo secularizado, su presencia no se considera
relevante”.
La mejor solución para afrontar la crisis está en animar a los creyentes a hacer la
experiencia del perdón de Dios en el sacramento, como ha dicho el cardenal Bertone,
Secretario de Estado. “Acoger el perdón de Dios permite al hombre lograr el éxito integral de
la propia existencia, y la nueva comunión con Dios es la renovación de la Humanidad,
liberada de los vínculos del mal”.
Como todo en la vida cristiana, el perdón de Dios sólo se comprende cuando se vive.
Así que, no dejemos de hacer esta experiencia, acercándonos a la reconciliación sacramental.
Perdona, Señor, nuestros pecados.
María, Madre del perdón, ayúdanos a recibir la gracia del perdón que el mor de Dios
nos ofrece tan ampliamente. ¡Haz que la misericordia de Dios sea para todos los creyentes, y
para cada hombre que busca a Dios, ese momento favorable, el tiempo de la reconciliación, el
tiempo de la salvación!
2
Padre Félix Castro Morales
Fuente: http://parroquiadelasoledad.org/ (Con permiso a homiletica.org)