1
Salmos diarios, Ciclo I, Año Impar. Explicados
XV Semana del Tiempo Ordinario
Sábado
Salmo 135
Demos gracia al Señor, porque Él es bueno. Este estribillo, que hemos
cantado es como una especie de profesión de fe: el Señor es bueno y su fidelidad
no nos abandona nunca, porque él está siempre dispuesto a sostenernos con su
amor misericordioso. Con esta confianza el orante se abandona al abrazo de su
Dios: “Gusten y vean qué bueno es el Seor -dice el salmista-; dichoso el que se
acoge a él” (Sal 33, 9; cf. 1 P 2, 3).
“Tenemos un Seor bueno, que quiere perdonar a todos”, recuerda en el
tratado sobre La penitencia, y añade: “Si quieres ser justificado, confiesa tu
maldad: una humilde confesión de los pecados deshace el enredo de las culpas...
Mira con qué esperanza de perdn te impulsa a confesar” (2, 6, 40-41: Sancti
Ambrosii Episcopi Mediolanensis Opera SAEMO, XVII, Milán-Roma 1982, p. 253).
Porque el Señor es bueno, podemos decir como en los Hechos de Euplo,
diácono de Catania, que murió hacia el año 304 bajo el emperador Diocleciano, el
mártir irrumpe espontáneamente en esta serie de plegarias: “¡Gracias, oh Cristo!,
protégeme, porque sufro por ti... Adoro al Padre y al Hijo y al Espíritu Santo. Adoro
a la santísima Trinidad... ¡Gracias, oh Cristo! ¡Ven en mi ayuda, oh Cristo! Por ti
sufro, oh Cristo... Es grande tu gloria, oh Señor, en los siervos que te has dignado
llamar a ti... Te doy gracias, Señor Jesucristo, porque tu fuerza me ha consolado;
no has permitido que mi alma pereciera con los malvados, y me has concedido la
gracia de tu nombre. Ahora confirma lo que has hecho en mí, para que quede
confundido el descaro del Adversario” (A. Hamman, Preghiere dei primi cristiani,
Milán 1955, pp. 72-73).
“Demos gracias al Seor porque es bueno, porque es eterna su
misericordia...”. Digámonos en lo íntimo de nuestro corazn: “¡Da gracias al Seor,
porque es bueno, porque es eterna su misericordia!” (Sal 136, 1).
Padre Félix Castro Morales
Fuente: http://parroquiadelasoledad.org/ (Con permiso a homiletica.org)