4ºde Pascua-A

HAY ALGUIEN QUE NO ENGAÑA

Padre Pedrojosé  ynaraja  díaz

 

Me atrevería a decir que es de consenso general, la mentira es un ingrediente que no falta nunca, ni en promesas, ni en pactos, ni en protocolos, ni en intercambios personales. Quien confía hoy en alguien, es porque aborrece a su contrario. La precaución no es suficiente, es preciso asegurarse cuanto más mejor.

Pese a que casi nos hayamos acostumbrado a tal fraude, vivimos descontentos. En la administración de la cosa pública, en el terreno económico y hasta en el sentimental, si analizamos conductas, descubrimos siempre algún engaño. En nuestro proceder, hablar y decidir, seamos sinceros, nunca falta este ingrediente-

Desgraciadamente el mal no es de hoy, viene de antiguo.

Examinar la realidad y examinarnos a nosotros mismos, es desagradable, pero hay que hacerlo y no esconderlo. Mayormente ahora. Es una de las funciones del profeta, su más genuina vocación y que tanta falta nos hace en nuestro tiempo.

Tales disquisiciones no aparecen de este modo en el discurso de Pedro, pero en él están involucradas. Es sincero y valiente, pero no se detiene en ello al acabar la denuncia.

Desde la cruda realidad ofrece a sus oyentes la esperanza. Esto es lo bueno y positivo.

Habla del perdón. Habla de Jesús, Señor y Mesías. Anuncia el Espíritu Santo.

Dios, no lo olvidemos, es misterio. Si fuéramos capaces de entenderlo, sería un ser chiquitito, al que intentaríamos dominar a nuestro gusto e imaginando tal posibilidad, caeríamos en un desilusión mayor.

Dios es misterio, pero no engaña, no manipula, no esclaviza.

Dios es Amor.

Hay que aprender siempre de Él, nunca estaremos saciados del todo, aunque nos acompañe y ofrezca poco a poco sus dones que aportan felicidad, no toda. La plenitud llegará al final. En la eterna existencia con Él íntimamente unidos.

Paso al texto evangélico.

La figura de Jesús como pastor a la mayoría de los lectores actuales no será muy significativa. Cada época tiene sus ocupaciones predilectas de acuerdo con las circunstancias del momento.

En mis tiempos de secundaria, la deslumbrante profesión correspondía a la ingeniería de caminos. Más tarde fue la investigación  minera, oro, platino o diamantes, era lo sumo. Una serie de factores, grandes incendios,  elevo la categoría de los ingenieros y guardianes de bosques. El cuerpo de bomberos era de chiste hace unos años, ahora son indispensables héroes. Por la triste realidad de esta temporada de pandemia,  la admiración, y muy merecida, se pone en los sanitarios. ¿Quién sucederá en el podio de la fama?.

Pese a que el oficio de pastor carezca de nombradía, quien en ello se ocupa goza de singularidad y nobleza. No me detendré a trazar sus rasgos antropológicos. Conocí de pequeño a algunos y he tenido cierto contacto con otros ya adulto. Pero no es común tal relación.

La figura y devoción al Sagrado Corazón y a su infinita misericordia, correspondería a como quiere el mismo Jesús que le consideremos y sin duda es semejante.

Debemos examinar en quien buscamos protección, quien nos engaña. Quien nos ama, llamémosle pastor o amable amigo. Quien ilumina nuestras sendas, quien a escondidas nos protege, es el Señor.     

Dios es misterio, pero nunca engaña.

 

OPINIÓN

HECHO HISTORICO

Acostumbramos a oír decir o leer, que cierta realidad minúscula de un villorrio, es un hecho histórico y tal calificativo deja satisfechos a quienes han tenido parte en ello. Todo acontecimiento enmarcado en el espacio tiempo lo es y muchos caen en el olvido.

Pero hay sucesos que sin duda tienen importancia histórica y dejan huella de ello. Sin duda nuestra triste actual realidad lo es. Tiene importancia e inducirá a consecuencias imprevisibles. No me refiero a la muerte de tantas personas que pienso con respeto y rezo por ellas con devoción. Me permito aludir a otro asunto. Vuelvo al de la retransmisión  de la misa por TV y al interés que en ello se ha puesto de moda. Tanta importancia ha tenido, que el mismo cardenal Dolan señalaba en su homilía que el presidente Trump, estaba siguiendo por TV aquella celebración (sic).

Tantas emisiones y desde tantos lugares, son singularidades de nuestro tiempo, pero pienso que no son sucesos de importancia histórica.

El P.I. Fossas, prior de Montserrat y muy amigo, me escribe a propósito de lo que dije. Traduzco y escojo algunos párrafos. “es interesante la reflexión que propones sobre el ambón. Seguramente no se precisan los permisos previstos para altar y sagrario. Pero hay que distinguir entre un atril como apoyo o exposición de la Biblia y un ambón. El ambón es un espacio, En el Bendicional se señala el rito de la bendición del ambón…. Para la Eucaristía se precisa un ministro ordenado para celebrarla…para la celebración litúrgica de la Palabra debe haber un ministro ordenado (diácono como mínimo para el evangelio, un laico instituido para las otras lecturas o el salmo responsorial. Agradezco las precisiones de un monje y doctorado, otra cosa es que se cumplan. En mis tiempos se me otorgó la orden del lectorado,  no recuerdo que la ejerciese.

Continuaré, pero ya adelanto lo que dice el obispo Caraveli: “

"Hay otro alimento y medicina espiritual que es la Palabra de Dios. Es importante alimentarnos con el pan de la Palabra”.

 

Padre Pedrojosé  ynaraja  díaz