DOMINGO V DE PASCUA (A) (Juan, 14, 1-12)
“Yo
soy el Camino, |
- La afirmación
que Jesús hace de si mismo nos viene muy bien para clarificar, quien es un
auténtico cristiano o seguidor de
Cristo.
- Hay muchas
maneras acomodaticias de decir que creemos en Cristo, por eso nos es
conveniente tener en cuenta que un verdadero cristiano no es el que,
simplemente, confiesa tener fe y dice que cree en Dios y en Jesucristo.
- Un auténtico
cristiano es aquel que, - además de
reconocer al Dios, Uno y Trino que Jesús nos ha revelado -, acepta, sin
fisuras, su mensaje, trata de luchar por identificarse con El en todas las distintas
facetas de la vida y de seguir ese CAMINO que Jesús identifica en el
Evangelio con su Persona.
-
Desgraciadamente son muchos los cristianos acomodaticios,
que se “fabrican” su religiosidad “a la carta”, acomodada a sus gustos,
a sus apetencias personales y a esas exigencias que entran en sus cálculos, sin
importarle mutilar la verdadera religiosidad que Cristo nos ha revelado.
- Aun
reconociendo, en estas personas, una cierta predisposición religiosa, de la que
carece un agnóstico, ¡esa no es la auténtica religiosidad que Cristo nos
propone y que hemos de practicar sus seguidores!
- ¿Cómo vamos a considerar verdadero cristiano, al que
dice:
-.”Yo creo a mi manera”:
-
O, “yo creo en Dios y en Cristo, pero no creo en
- O, “Yo creo, pero no practico“?
- Ser auténtico cristiano y seguidor de Cristo es, ser
consecuente con su Persona, con su mensaje y con el CAMINO que El nos ha
mostrado.
- A manera de
ejemplos: Si Cristo ha fundado una
Iglesia jerárquica, nosotros no
podemos transformarla en democrática
porque eso es lo que hoy está mejor visto. Ni es de recibo, rebajar las
exigencias de la moral cristiana de la doctrina de Cristo, para que goce de más
popularidad.
“Yo soy el
camino, la verdad y la vida”
- Hoy el Señor
parece querer, trazarnos unas líneas maestras para que se reconozcan quienes son sus verdaderos seguidores:
“Yo soy el
camino, la verdad y la vida”,
y no se puede ser un verdadero seguidor mío fuera de ese Camino, de esa Verdad y de esa
Vida.
Guillermo Soto.