Lunes 10 de Octubre de 2011
Lunes 28ª semana de tiempo ordinario 2011
Romanos 1,1-7
Pablo, siervo de Cristo Jesús, llamado a ser apóstol, escogido para
anunciar el Evangelio de Dios. Este Evangelio, prometido ya por sus profetas en las
Escrituras santas, se refiere a su Hijo, nacido, según la carne, de la estirpe de
David; constituido, según el Espíritu Santo, Hijo de Dios, con pleno poder por su
resurrección de la muerte: Jesucristo, nuestro Señor. Por él hemos recibido este
don y esta misión: hacer que todos los gentiles respondan a la fe, para gloria de su
nombre. Entre ellos estáis también vosotros, llamados por Cristo Jesús. A todos los
de Roma, a quienes Dios ama y ha llamado a formar parte de los santos, os deseo
la gracia y la paz de Dios, nuestro Padre, y del Señor Jesucristo.
Salmo responsorial: 97
R/El Señor da a conocer su victoria.
Cantad al Señor un cántico nuevo, / porque ha hecho maravillas: / su
diestra le ha dado la victoria, / su santo brazo. R.
El Señor da a conocer su victoria, / revela a las naciones su justicia: / se
acordó de su misericordia y su fidelidad / en favor de la casa de Israel. R.
Los confines de la tierra han contemplado / la victoria de nuestro Dios. /
Aclama al Señor, tierra entera; / gritad, vitoread, tocad. R.
Lucas 11,29-32
En aquel tiempo, la gente se apiñaba alrededor de Jesús, y él se puso a
decirles: "Esta generación es una generación perversa. Pide un signo, pero no se le
dará más signo que el signo de Jonás. Como Jonás fue un signo para los habitantes
de Nínive, lo mismo será el Hijo del hombre para esta generación. Cuando sean
juzgados los hombres de esta generación, la reina del Sur se levantará y hará que
los condenen; porque ella vino desde los confines de la tierra para escuchar la
sabiduría de Salomón, y aquí hay uno que es más que Salomón. Cuando sea
juzgada esta generación, los hombres de Nínive se alzarán y harán que los
condenen; porque ellos se convirtieron con la predicación de Jonás, y aquí hay uno
que es más que Jonás."
COMENTARIOS
A diferencia del texto paralelo de Mateo, Lucas no apunta a la
resurrección de Jesús, aludida en los tres días que permaneció Jonás dentro del
pez, sino que se fija más bien en la predicación y la sabiduría de Jesús. Ése es el
signo que Dios da a aquella generación que buscaba la presencia de Dios sólo en lo
maravilloso. Jesús ha venido a anunciar la conversión, no sólo de los judíos, sino
también de los paganos, ofreciendo a todos el perdón universal de Dios. Los
contemporáneos de Jesús están con el corazón endurecido, contra la llamada de
Dios a la conversión, por lo tanto solo les da una señal que los ha de condenar al
juicio final, como dice Pablo es el mismo Jesús que obra con el poder de Dios que
les puede conducir a la fe.
Este es el verdadero signo de Jesús, el amor hasta la muerte, para
otorgar el perdón a todos, incluyendo a los enemigos. ¿Aceptamos este signo en
nuestros tiempos?
Juan Alarcón, s.j..
(Extracto de servicios KOINONÍA)