1
Salmos diarios, Ciclo II, Año Par. Explicados
Jueves
Salmo 95
El anuncio de las maravillas que ha hecho Dios tiene una proyección
universal. Está destinado a todos los pueblos. A todos tiene que llegar ese anuncio.
De ahí la vocación misionera del cristiano: contar a todas las naciones las
maravillas del Señor. Por eso usamos el Salmo 95 para clamar: “Canten al Señor
un cántico nuevo, canten al Señor toda la tierra”.
Todos somos llamados e invitados a celebrar la soberanía y la grandeza de
Dios. Él nos ama a todos, sin distinción de razas ni culturas. Él nos ha creado
porque nos quiere con Él, junto con su Hijo, participando de su Vida y de su Gloria
eternas. Por eso alabemos y bendigamos al Señor y proclamemos sus maravillas a
todos los pueblos, para que todos conozcan el amor que Él nos ofrece y para que,
reconociéndolo ellos también como su Dios y Padre, junto con nosotros alcancen los
bienes eternos, de los que el Señor quiere hacernos partícipes. A Él sea dado todo
honor y toda gloria, ahora y por siempre.
Señor Dios todopoderoso, concede a tu Iglesia, que canta en honor de tu Hijo
un cántico nuevo, celebrando su resurrección, alegrarse también un día con el cielo
y la tierra, y vitorear delante de Cristo, cuando llegue, en su última venida, a regir
el orbe con justicia y con fidelidad. Te lo pedimos por el mismo Jesucristo nuestro
Señor
Padre Félix Castro Morales
Fuente: http://parroquiadelasoledad.org/ (Con permiso a homiletica.org)