1
XXXIV Semana del Tiempo Ordinario (Año Par)
Sábado
Lc 21, 34-36
Velen para que puedan escapar de todo lo que ha de suceder . La verdadera
actitud del cristiano ha de ser la vigilancia, el evitar el dejarse arrastrar por la
forma de actuar de los insensatos, aquellos que piensan que lo tienen todo para
vivir al margen de Dios, seguros de sí mismos.
Jesús nos invita a vivir como el servidor que espera en cualquier momento la
vuelta de su señor. No podemos sucumbir a las atracciones de este mundo que nos
puedan apartar del camino de Dios; para ello es necesaria la oración vigilante, así
podremos presentarnos ante el Señor, cuando venga, sin temor.
En la vida diaria corremos el peligro de dejarnos absorber por ocupaciones e
intereses materiales. En Adviento que estamos muy cerca de comenzar es una
ocasión favorable para avivar la fe auténtica, para volver a entablar una relación
íntima con Dios y para hacer un compromiso evangélico más generoso.
Velen para que puedan escapar de todo lo que ha de suceder . Aunque este
mandato de Cristo vale para todo tiempo, resulta más elocuente e incisivo al inicio
del Adviento, que comenzamos hoy por la noche. Acojámoslo con humilde docilidad.
Dispongámonos a traducirlo en gestos prácticos de conversión y reconciliación con
nuestros hermanos. Sólo así la fe se fortalece, la esperanza se consolida y el amor
se transforma en estilo de vida que caracteriza al creyente.
Padre Félix Castro Morales
Fuente: http://parroquiadelasoledad.org/ (Con permiso a homiletica.org)