Master·evangeli.net
Día litúrgico: Feria privilegiada de Adviento: 23 de Diciembre
Texto del Evangelio ( Lc 1,57-66): Se le cumplió a Isabel el tiempo de dar a luz,
y tuvo un hijo. Oyeron sus vecinos y parientes que el Señor le había hecho gran
misericordia, y se congratulaban con ella (). Al octavo día fueron a circuncidar al
niño, y querían ponerle el nombre de su padre, Zacarías, pero su madre, tomando
la palabra, dijo: No; se ha de llamar Juan. () En toda la montaña de Judea se
comentaban todas estas cosas; todos los que las oían las grababan en su corazón,
diciendo: «Pues, ¿qué será este niño?». Porque, en efecto, la mano del Señor
estaba con él.
Comentario: REDACCIÓN evangeli.net (elaborado a partir de textos de Benedicto
XVI) (Città del Vaticano, Vaticano)
Juan, el Bautista
Hoy nos preguntamos: "¿Qué será este niño?". Su aparición llevaba consigo algo
totalmente nuevo: desde su concepción hasta su circuncisión —con el nombre de
Juan—, llegando a su ministerio, todo es original. Juan anunciará a alguien más
Grande que había de venir después de él. Ha sido enviado para preparar el camino
a ese misterioso Otro; toda su misión está orientada a Él.
En los Evangelios se describe esa misión con pasajes del Antiguo Testamento
(Isaías, Malaquías, Éxodo): "Una voz clama en el desierto: ¡Preparad el camino al
Señor!"; "Yo envío a mi mensajero delante de ti para que te prepare el camino"...
Con la predicación del Bautista se hicieron realidad todas estas antiguas palabras
de esperanza: se anunciaba algo realmente grande.
—Por fin aparecía un profeta cuya vida también le acreditaba como tal. Por fin se
anunciaba de nuevo la acción de Dios en la historia. Juan bautiza con agua, pero el
más Grande, Aquel que bautizará con el Espíritu Santo y con "fuego", está al llegar.
“servicio brindado por el http://evangeli.net/evangelio”. Con permiso a
homiletica.org