“Permanezcan en mi amor”
Jn 15, 9-11 “
Autor: Pedro Sergio Antonio Donoso Brant ocds
1. PERMANECER EN EL
Jesús, les habla a sus apóstoles del ansia de su amor hacia ellos para que fructifiquen
unidos a El, pues los ama al modo sobrenatural, como el Padre le ama a El. Unidos a El y
amados por El no necesitan, para dar “mucho fruto,” más que “permanecer en El.”
Y la prueba de esta permanencia son las obras: mis mandamientos, mis preceptos. Porque
no todo el que diga Señor, Señor, entrará en el reino de los cielos, sino el que hace la
voluntad del Padre (Mt 7:21). Ha de ser copiado su ejemplo: como yo cumplí los
mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor.
2. Y PARA NUESTRO GOZO SEA CUMPLIDO
Y les dice esto para que mi gozo sea el de ustedes, y ese gozo sea perfecto Porque
cumplen el mensaje del Padre, que El trajo como el Enviado. Y para nuestro gozo sea
cumplido. Pues al saber que estamos unidos a Cristo-Vid, permaneceremos unidos a El y
que al guardar sus mandatos, sabemos entonces la meta suprema de sus aspiraciones: ser
amados por el Padre.
Jesús nos dice: como también yo los he amado a ustedes. Jesús nos ama con el mismo
amor que ama al padre. Definimos el amor como aquel sentimiento de afecto, cariño,
solidaridad que una persona siente hacia otra y que se manifiesta generalmente en desear
su compañía, alegrarse con lo que se considera bueno para ella y sufrir con lo que se
considera malo.
3. ¿CÓMO FUE EL AMOR DE JESÚS?
Le decimos amor, a nuestra persona amada, decimos que se hace con amor, cuando se
hace algo con esmero, con mucho cuidado, cuando deseamos hacer algo con mucho gusto,
decimos que lo hacemos de mil amores, cuando somos generosos en hacer algo y si lo
hacemos de forma gratuita, decimos que lo hacemos por amor al arte, y cuando pedimos
algo con humildad y caridad decimos por amor a Dios.
¿Cómo fue el amor de Jesús?, En los Evangelios encontramos la fuerza del amor de Jesús,
es un libro abierto para descubrir como fue el amor de Jesús, “En esto Conocerán todos
que sois mis Discípulos, si tenéis amor los unos por los otros” (Jn, 13-35), “Como el Padre
me Amó, también yo os he amado; permaneced en mi amor” (Jn 14-9), “Si Guardáis mis
mandamientos, permaneceréis en mi amor; como yo también he guardado los
mandamientos de mi Padre y permanezco en su amor”, (Jn 14-10) “Este es mi
mandamiento: que os améis los unos a los otros, como yo os he amado” (Jn 14-12), “Nadie
tiene mayor amor que éste, que uno ponga su vida por sus amigos” (Jn 14-13) “Yo les he
dado a conocer tu nombre y se lo daré a conocer Todavía, para que el amor con que me
has amado esté en ellos, y yo en ellos." (Jn 17-26)
4. EL AFECTO DE JESÚS
Podemos encontrar muchas manifestaciones de sensibilidad, por la cual conocemos como
es el afecto de Jesús, podemos descubrir al hombre con la inclinación natural a hacer el
bien, podemos hallar dulzura, suavidad, amabilidad de carácter, no solo tiene la facultad de
ser el perfecto amigo bueno, además en todo lo parece, se manifiesta claramente su
sentimiento de pena y lastima por la desgracia o el sufrimiento ajeno, para todo se inclina
con afecto, su carácter es templado, apacible, en otras palabras es el puro amor, que nos
maravilla por su aptitud del conocimiento perfecto de la comprensión, con un dominio
absoluto para el entendimiento y la capacidad para respetar y ser tolerante con los demás,
El posee el mayor grado posible de la cualidad
Amor puro por los niños;"Dejad que los niños vengan a mí, y no se lo impidáis porque de los
que son como éstos es el Reino de los Cielos" (Mt 19, 14), ese amor natural por el bien de
los demás;”Entonces Jesús, levantándose, le dijo: "Mujer, ¿dónde están ellos? ¿Ninguno te
conden?" "Ninguno, Seor", respondi ella. Y Jesús le dijo: "Yo tampoco te condeno”.
Vete, desde ahora no peques más” (Jn 8, 10-11), así podríamos llenar muchas páginas de
ejemplo sobre como amo Jesús.
5. A QUIEN MIRÓ JESÚS, LOS HIZO CON AMOR
A quien miró Jesús, los hizo con amor, así nos mira a nosotros hoy, con afecto, y cuando
nos habla lo hace al corazón, su suave voz es además una insistencia permanente en
nuestra conciencia, voz que nos invita a seguirlo, aceptarlo y a la cual debemos guardar
fidelidad, y a amarlo como el lo hizo y lo sigue haciendo.
Así es el amor de Jesús, ese que no condena, ese que nos da misericordia, ese que
transforma nuestras vidas, ese que nos da paz absoluta, por tanto podemos definir que
Jesús es perfecto e inigualable sinónimo de amor.
Escribe Santa Teresita del Nio Jesús (Lisieux);”Yo no tengo otro deseo que amar a
Jesucristo, y amarlo con todas las fuerzas de mi alma hasta el exceso”….. “Que dulce es el
camino del amor a Dios” (Historia de un Alma Cap. 23)
Cristo Jesús, viva en sus corazones