" Cuando venga el Paráclito que yo les enviaré desde el Padre"
Jn 15, 26 - 16, 1-4
Autor: Pedro Sergio Antonio Donoso Brant ocds
1. “CUANDO VENGA EL PARÁCLITO”
En aquel tiempo dijo Jesús a sus discípulos: “Cuando venga el Paráclito”, se esta a
refiriendo a quien conocemos como el Consolador. Dice Jesús que este el Espíritu de la
verdad que yo les enviaré y que procede del Padre. No es aquí una simple fuerza o acción
divina, es así como de la confrontación de textos en san Juan, se ve que lo está
presentando como una persona divina; “Yo rogaré al Padre y él les dará otro Paráclito para
que esté siempre con ustedes” (Jn 14:17). Además, Jesús dice que él lo enviará; “la verdad
que yo les enviaré”. Pero esto, por el método de alusión o insinuación, tiene un valor
especial, porque en el Antiguo Testamento sólo Yahvé podía enviar este Espíritu, entonces
Jesús se está poniendo, al enviarlo, en la misma esfera divina.
Al Paráclito, por la función que va a desempeñar de testimoniar a Jesús, se lo llama, como
en el capítulo anterior, el Espíritu de la verdad
2. “ÉL DARÁ TESTIMONIO DE MÍ”
Dice Jesús: “él dará testimonio de mí”, es decir va a testificar el mensaje que Jesús traía del
Padre. El Evangelio, esta centrado en la temática de san Juan, en que Jesús es el
verdadero Hijo de Dios. Y lo va a testimoniar con las maravillas que realizará a favor de
Jesús y su obra. Fundamentalmente en Pentecostés, con el cumplimiento de la promesa
que hizo Jesús de enviarlo desde el cielo (Jn16:7ss), acusando así al mundo del gran
pecado contra Jesús (Jn 16:9ss), (ss = siguientes). También los carismas en la primitiva
Iglesia (Hecht 10:44ss; 19:5-6; 1 Cor c.12; Gal 3:5), y, en general, los milagros de todo tipo,
que, hechos por el Espíritu Santo, testifican la verdad del mensaje de Jesús.
3. “LES HE DICHO TODO ESTO PARA QUE NO SE ESCANDALICEN”
Jesús además les anuncia la persecución por causa suya; “Les he dicho todo esto para que
no se escandalicen”, es decir para que no pierdan la fe en la prueba. “Porque los expulsarán de
la sinagoga”; más aún, llegará un momento en el que les quiten la vida pensando que así dan
culto a Dios. El horizonte de estas persecuciones es judío: los expulsarán de la sinagoga, no
en sentido local, sino de la congregación de Israel. Y como la hora de Dios para la expansión
mesiánica llega, llegará también la persecución al máximum: la muerte.
4. “Y LOS TRATARÁN ASÍ PORQUE NO HAN CONOCIDO NI AL
PADRE NI A MÍ”.
Directamente las palabras son dirigidas a los apóstoles para la hora de su ausencia, sin
embargo el contenido doctrinal tiene mayor amplitud. Sucede que la excomunión de la
comunidad judía era practicada desde la vuelta de la cautividad (Esd 10:8), esta tenía
diversos grados; el último llevaba agregado la prohibición de todo para el excomulgado.
Esta son las persecuciones que por falso celo hizo Saulo de Tarso, es el motivo por el que
se mata a San Esteban (Hech 6:8ss) y sobre el 44 a Santiago el Mayor (Hech 12:1ss).Y
con este falso celo creerán prestar un servicio a Dios. El término usado significa ofrecer un
acto de culto litúrgico. En la literatura rabínica se lee: “Al que derrama la sangre de los
impíos se le ha de considerar como si hubiese ofrecido un sacrificio”. Tal es la paradoja del
fanatismo de Israel contra los seguidores del Hijo de Dios.
El motivo de hacer esto es la ceguera culpable, tantas veces expuesta o aludida en san
Juan, por no haber conocido ni al Hijo ni al Padre, que le envió. Así es como lo dice Jesús:
Y los tratarán así porque no han conocido ni al Padre ni a mí” .
5. “LES DIGO ESTO DE ANTEMANO”
Para que no pierdan la fe en la prueba. La advertencia –profética- que les hace, tiene para
ellos un sentido apologético: que no se escandalicen a la hora de su cumplimiento. -Les
digo esto de antemano, para que, cuando llegue la hora, recuerden que ya estaba
anunciado- Cuando los poderes de la tierra los persigan, que sepan que Jesús se lo
anunció; no es fracaso en su doctrina, es la permisión del plan del Padre. Así les anuncia la
persecución y el triunfo, o mejor, el triunfo por la persecución.
6. NO LES DIJE ESTAS COSAS DESDE EL PRINCIPIO, PORQUE YO
ESTABA CON USTEDES.
Antes, desde el principio, no les anunció esto porque estaba Él con ellos, y este vaticinio es
sobre la suerte de ellos en la hora de su ausencia. Si aparecen vaticinios de persecuciones
en el Sermón de la Montaña (Mt 5:11; Lc 6:22) , en la instrucción a los Doce (Mt 10:16-19) y
a los discípulos (Lc 12:4) y en el Apocalipsis sinóptico (Mt 24:9 par).- , no son obstáculo a
esta afirmación de ahora; porque varios de estos anuncios están agrupados artificiosamente
y otros no están lejanos, en su anuncio, de los días de la pasión. De ahí que el término
desde el principio no tenga una interpretación estricta desde su vocación al apostolado; ni el
momento de decirse esto en este discurso excluye el que no se les hubiese dicho, más o
menos claramente, en otras ocasiones. Pero su presencia no exigía decírselo o
recordárselo con el apremio apologético de su inminente partida.
7. SER APÓSTOL DE JESÚS, ES UNA OBRA ESPECIAL
Después de este análisis, vemos que ser apóstol de Jesús, es una obra especial, que solo
puede realizar el Espíritu Santo, en efecto es el que va a descubrir al discípulo de Jesús el
sentido de sus palabras y del mismo modo todo su mensaje evangélico. Es el Espíritu
Santo, el que también descubre en nosotros la nobleza de nuestros ideales, la dimensión de
nuestro apostolado y lo que nosotros nos proponemos como apóstol del Señor.
El verdadero apóstol del Señor, es absolutamente incondicional, y busca conocerlo con
profundidad, es decir se empapa de Jesús, lo ama y hace de el sus vida, y a toda hora y por
siempre la ocupa en extender su Reino. Nuestro ideal es vivir el gozo pascual y con
especial interés en las dificultades.
Dejemos que el Espíritu Santo, se encargue de moldear nuestra realidad interior, que nos
haga unos buenos y verdaderos hijos de Dios, amándolo intensamente. Dejemos que el
Espíritu Santo, nos entregue la ayuda del los dones de la sabiduría, la inteligencia, el
consejo, la fortaleza, la ciencia, la piedad y el temor de Dios. Dejemos también que moldee
nuestra actividad externa, siendo dóciles a sus inspiraciones, para que nuestra tarea de
apóstol y evangelizadora, que de alguna forma todos tenemos que hacer, sea bien
acompañada.
El Señor les Bendiga