III Domingo de Adviento, Ciclo B
Juan 1, 6-8.19-28
Autor: Padre Felipe Santos Campaña SDB
Impulsos Evangélicos
1.
El Espíritu de
Dios está sobre mí. La vaciedad de alguna gente se debe a que su interior está
sin casi nada. Alfonso X el Sabio decía:” Los cántaros, cuanto más vacíos, más
ruido hacen”. ¡Animo! No seas así. Llénate del Espíritu.
2. El Señor te
envía para vendar los corazones desgarrados. Mira a tu derredor:¡ cuántas
rupturas afectivas, cuántas violaciones a la dignidad de la persona, cuántos
necesitados y necesitadas! Tienes mucho que hacer. Nadie escurra el bulto. Cura,
alienta y sana las heridas de los demás.
3. Desbordo de gozo con el Señor y me alegro con mi Dios
por
que me ha vestido un traje de gala. Estas palabras
en boca de Dios las acogen los creyentes cada día como un rocío suave para su
vida personal. Por eso no se debería ver a ningún cristiano triste. Dios te da
tal gozo que nunca desaparece de ti. No es como los cubatas que exaltan tu
alegría física durante un rato.
4. El traje que Dios te pone es tan elegante que llega
hasta el mismo cielo. Y no
tienes que presentarte a ningún concurso de
modelos. Tu vida digna y llena de fe es la mejor vestidura.
5. Estad
siempre alegres. San Pablo, en medio de sus dificultades, cárceles y naufragios
no perdía la alegría. ¿Sabes por qué? Porque la cimentaba en Dios. El erudito
francés Berger de Xivrey decía: “ La paz verdadera no es únicamente el
equilibrio de potencias sino esa gran alegría de vivir en la amistad”.
6. Guardaos de
toda forma de maldad. No hay cosa más imbécil para la persona que hacer daño a
sus semejantes. Es gente sin madurez ni respeto. Cicerón, 106 antes de Cristo,
afirmaba: ”Ningún hombre ha llegado a ser grande si no ha sido movido por cierta
inspiración divina”. Tenlo en cuenta.
7. En medio de vosotros hay uno que no conocéis. Juan
Bautista fue claro y valiente
en su respuesta a los fariseos. ¿ Cómo es posible
que, habitando Dios en ti, no lo conozcas? Lo conoces de memoria. Pero la
palabra conocer en la lengua de Jesús significa “tener experiencia de él”. Desde
que comprendí esta realidad, mi vida dio un giro de 180º( Annette, 21 años)
8. Juan venía como testigo de Dios. Si hay algo que
arrastre a los demás al bien son los testigos auténticos de Dios.
Plauto, comediógrafo latino, te declara:” Un
testigo ocular es de más peso que diez auditivos”. ¿ Qué testimonio das de tu
vida?
9. Como un
jardín hace brotar sus semillas, así el Señor hará brotar la justicia. El joven
se siente feliz cuando brota en su corazón el amor. Su rostro adquiere
resplandor. El creyente, guiado por Dios, es un jardín que esparce el buen olor
de Cristo. Tiene tantas semillas en su interior que no cesa de florecer en
cualquier estación del año.
10. A los hambrientos los colma de bienes. A los ricos los despide vacíos. Hambriento de Dios, decía Antonio, entre sus compañeros: Estoy hambriento de Dios. Cuanto más lo como en la Eucaristía, más necesidad tengo de que me sacie. Sin embargo, su amiga Julia, una rica de mucha “pasta” se encontraba vacía de Dios y llena de su orgullo. Un amigo le dijo un día estas palabras del naturalista suizo Agassiz Jean:” No puedo perder el tiempo en ganar dinero”.