V Domingo de Cuaresma, Ciclo B
Juan 12, 20-33:
Quisiéramos ver a Jesús

Autor: Padre Jesús E. Osorno Gil. mxy

 

 

Durante la cuaresma se ha ido acrecentando nuestra convicción cristiana de ver a Jesús. La cercanía de la Pascua  nos debe hacer ya encontradizos con Él. Jesús sube a Jerusalén y unos griegos le piden a Felipe que les ayude a encontrarse con Él. Quieren verlo, conocerlo. Felipe se hace ayudar de Andrés para conseguir esta cita que en el texto bíblico queda pendiente.

El verbo escuchar es muy socorrido en el Antiguo Testamento. En cambio en el Nuevo es el verbo ver. “Vengan y verán” es la invitación de Jesús. Es el principio del discipulado. Estar cerca del Maestro, participar de su cátedra es ya un principio de aprendizaje que se va interiorizando con la visión.

Jeremías nos dice que en la Alianza nueva ya no necesitaremos enseñarnos los unos a los otros, ni siquiera a los más pequeños porque todos le conoceremos. Todos, todas. Y el evangelio añade: “Mirarán a quien traspasaron”. La mirada como mecanismo de conocimiento. La mirada como gozo y fruición en el encuentro.

La cuaresma también es escuela en donde aprendemos a “mostrar” a Jesús. Darlo a conocer. Llevar a la multitud por el sendero del evangelio. Escuela que pasa por la cruz para llegar a la resurrección. Discipulado y misión van juntos. A través nuestro los demás deben descubrir a Jesús. A esto llamamos testimonio, compromiso bautismal. 

Cochabamba 29.03.09