III Domingo del Tiempo Ordinario, Ciclo A

Autor: Padre Jorge Humberto Peláez S.J. 

 

ü Lecturas:

o   Profeta Isaías 8, 23b – 9, 3

o   I Carta de san Pablo a los Corintios 1, 10-13. 17

o   Mateo 4, 12-23 

ü El texto evangélico de este domingo nos ofrece elementos muy interesantes sobre el conjunto de la actividad apostólica de Jesús; en ese sentido, nos da información sobre los destinatarios de su obra salvífica, el contenido central de su mensaje, su grupo de colaboradores y la articulación entre la predicación y sus intervenciones milagrosas a favor de la calidad de vida de los que lo escuchaban. 

ü Lo primero que nos presenta el evangelista Mateo es la presencia de Jesús en las tierras de Galilea:

o   El texto nos relata que “al enterarse Jesús de que habían arrestado a Juan, se retiró a Galilea. Dejando Nazaret, se estableció en Cafarnaúm, junto al lago, en el territorio de Zabulón y Neftalí”

o   Después del bautismo en el río Jordán ¿por qué no se quedó en Judea, cerca de la ciudad santa de Jerusalén? El evangelista nos sugiere la respuesta a través del verbo que utiliza: “se retiró”. La prisión de Juan Bautista era una señal de que la situación era peligrosa para todos aquellos que habían estado cerca del Bautista. La prudencia sugería alejarse del centro político pues el ambiente era tenso.

o   El evangelista Mateo nos hace una precisión importante: no se trató de una decisión dictada exclusivamente por la prudencia humana; desplazándose a Galilea se cumplía el plan de Dios anunciado con siglos de anticipación; de ahí la referencia  a las palabras del profeta Isaías, cuyo texto completo hemos escuchado en la primera lectura: “las tierras de Zabulón y Neftalí, la región que va desde el mar hasta el otro lado del Jordán, la Galilea rodeada de gentiles. El pueblo que andaba en tinieblas vio la luz de un gran día; vivían en sombras de muerte, y una luz les brilló”.

o   En estas palabras del profeta Isaías, reproducidas por el evangelista Mateo, se nos explica que la decisión de Jesús de trasladarse a Galilea no obedeció exclusivamente  al deseo de evitar un enfrentamiento con el poder político en los comienzos de su misión; Jesús seguía la voluntad del Padre, que quería que el mensaje del Reino fuera anunciado, desde los comienzos, a los judíos y a los no judíos, que eran una porción significativa de los habitantes de esa región.

o   Desde los inicios de la actividad evangelizadora de Jesús, la buena noticia está abierta a todos los hombres y mujeres de buena voluntad que quieran acogerla; tal es el significado  de su presencia en la Galilea rodeada de gentiles. 

ü ¿Cómo nos presenta el evangelista Mateo la síntesis de lo que será el mensaje de Jesús a lo largo de su ministerio apostólico?

o   El texto es muy sencillo: “Vuelvan a Dios porque ya llega su reinado”. En estas breves palabras, encontramos dos elementos: la actitud interior de la comunidad (“vuelvan a Dios”) y el contenido del mensaje de Jesús, que es el anuncio del Reino de Dios.

o   Volverse a Dios es abrirse a la palabra de Dios, dejarse cuestionar por ella, poner a un lado nuestros pequeños intereses y confiar en Él.

o   El Reino es la quintaesencia del anuncio de Jesús; el Reino no es otra cosa que la salvación presente y operante en medio de la historia. 

ü Otro elemento muy interesante  que nos ofrece el texto evangélico de este domingo es la configuración del equipo apostólico:

o   La construcción del Reino de Dios implica la consolidación de una comunidad nuclear que se encargará de comunicar al mundo la buena noticia de la salvación.

o   Esta comunidad nuclear estará formada por los apóstoles; el evangelio de hoy nos narra la vinculación de dos parejas de hermanos: Pedro y Andrés, Santiago y Juan. Ellos constituyen la célula que dio origen a la Iglesia.

o   Son hombres sencillos, pescadores,  a quienes invita a compartir su proyecto; quiere hacerlos pescadores de hombres. 

ü Finalmente, el evangelista Mateo nos explica la metodología que utilizará Jesús, que consistirá en articular el ministerio de la palabra con acciones milagrosas para aliviar el sufrimiento humano. Por eso nos dice el evangelista que  Jesús “recorría a toda Galilea enseñando en las sinagogas, proclamando la buena noticia del Reino de Dios y curando toda clase enfermedades y dolencias del pueblo. 

ü Que estas sencillas reflexiones sobre los comienzos de la actividad apostólica de Jesús nos ayuden a comprender la universalidad de su mensaje de salvación, su anuncio del Reino de Dios, el llamado a colaborar en su difusión y nos sensibilice ante el sufrimiento de nuestros hermanos.