Marcos 5, 21-43

"Tu fe te ha curado. Vete en paz y con salud."

Autor: Padre Juan José Palomino del Alamo  

 

1) Esta mujer es considerada como impura para la Ley judia y contamina a quien toque, hacéndolo impuro. 
Por eso tiene prohibido mezclarse entre la gente. Quiere tocar al menos el fleco de Jesús, guiada por la fe, y haciendo caso omiso de una pureza legal. Aún no sabe quién es Jesús, pero está segura, cree que la va a sanar. Jesús respeta esta fe incipiente, la invita a que lo reconozca, y es curada.

2) La hija de Jairo: Es Jairo el responsable de la comunidad judía del lugar y pide a Jesús que sane a su hija agonizante. Aquí Jesús se enfrenta con la muerte de una niña, llamada a vivir. Pasos que da Jesús:
a) Dicen a Jairo que no moleste ya al Maestro, porque la niña acaba de morir. Jesús nos enseña que para Dios lo más fuerte no es la muerte sino la vida. Y sólo pide FE.
b) Al llegar a la casa, se encuentra Jesús con gritos y llantos según la costumbre judía en los velatorios. No se deja Jesús impresionar por estos disfraces. Y sigue.
c) "La niña no ha muerto sino duerme", les dice. Esperan que Jesús la levante. Entonces, la llama Jesús para que vuelva a la vida y la niña vuelve a la vida.

3) Tengamos en cuenta ante estos hechos que:
a) Jesús quebranta la legalidad judía tocando con sus manos a la mujer con hemorragias y a la niña difunta. Y él, Jesús, quedaba por ello impuro según la Ley judía.
b) Marcos nos da a entender que la Buena Noticia de Jesús rompe todos los moldes y nos libera de todas de todas las ataduras: enfermedades, muerte...
Y nos hace libres frente a la servidumbre de aquella Ley. Para ser libres nos eligió el Señor.