San Lucas 9,23-26:
Al estilo de JesúsAutor: Regnum Christi
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Evangelio:San Lucas 9,23-26: Al
estilo de Jesús
En aquel tiempo, Jesus le dijo a la multitud: “Si alguno quiere
acompañarme, que no se busque a sí mismo, que tome su cruz de cada día y me siga.
Pues el que quiera conservar para sí mismo su vida, la perderá; pero el que la
pierda por mi causa, ese la encontrará. En efecto, ¿de qué le sirve al hombre
ganar todo el mundo, si se pierde a sí mismo o se destruye? Por otra parte, si
alguien se avergüenza de mí y de mi doctrina, también el Hijo del hombre se
avergonzará de él cuando venga revestido de su gloria y de la del Padre y de la
gloria de los santos ángeles”.
Oración introductoria:
Señor, Tú sabes que creo en ti, que espero en ti y que te amo. Te
agradezco Señor el don de mi fe.
Petición:
Jesucristo, quiero acoger tu llamada en mi corazón de tal manera que me
entregue completamente, sin cálculos ni beneficios personales.
Meditación:
La condición que Jesús nos pone es querer seguirlo. ¿Estamos decididos
a permanecer fieles al evangelio y a pagar el precio necesario para ser amigos
de Jesús? No basta creer que Cristo es Dios, debemos seguirle por el mismo
camino que Él recorrió, es decir por el de la cruz. Para ello, es necesario
estar deprendidos de nosotros mismos, de todo lo que poseemos y somos, incluso
de las cualidades personales, de la salud, de los éxitos, etc. Hay que
desapegarse de aquellas obras buenas que realizamos y ofrecérselas a Dios
diciéndole que no queremos nada para nosotros mismos, sino para su gloria. ¿De
qué nos sirve tener esto o aquello si al Señor no le interesa? En nuestra vida
tenemos dos caminos: por un lado, la vida centrada en nosotros mismos, en
nuestros intereses y gustos; por otro lado, una vida centrada en Cristo y en los
demás, salpicada de abnegación personal, de privación en los pequeños detalles,
de caridad y entrega. Sólo viviendo al estilo de Jesús daremos testimonio de la
fuerza de la cruz y del amor.
Reflexión apostólica:
La cruz es el único camino para llegar a Cristo. Por la cruz y desde la
cruz Jesús nos enseña el camino de la entrega y del apostolado. Salgamos de esta
meditación decididos a cargar con la cruz que el Señor nos ha otorgado para
acompañarle y para santificarnos.
Propósito:
Que el día de hoy todo mi actuar sea coherente con mi fe cristiana.
Diálogo con Cristo:
Te agradezco Jesús con toda mi alma el que me des ocasiones para poder
amarte en medio de la lucha y del sacrificio, del trabajo y las dificultades,
pues sé bien que esto es una muestra amorosa de tu singular predilección.
«La perfección de Cristo es tal que siempre hay opción para progresar en su
imitación y seguimiento» (Cristo al centro, n. 546).